Datos del INE señalan que la tasa específica de fecundidad entre 2020 y 2022 en Chile corresponde a 23,2 nacimientos por cada 1.000 jóvenes entre los 15 y 19 años.
Cada 26 de
septiembre se conmemora el Día Mundial de la Prevención del Embarazo en Adolescentes,
iniciativa que fue impulsada con el objetivo de crear consciencia en las y los
jóvenes acerca de las alternativas anticonceptivas que tienen a su disposición,
para así tomar decisiones libres, responsables e informadas acerca de su salud
sexual y reproductiva, con el fin de prevenir el alto índice de embarazos no
planificados a nivel mundial.
Más allá de
todos los esfuerzos desplegados en términos de salud pública, esta temática es muchas
veces invisibilizada y los riesgos asociados a los nacimientos no deseados quedan
relegados a un segundo plano. Partos prematuros, bajo peso al nacer o
mortalidad neonatal en los recién nacidos, además de preeclampsia, endometriosis
e infecciones sistémicas en las madres.
El foco debe
estar en la educación sexual activa, consciente y actualizada, además de la
responsabilidad en el uso de métodos anticonceptivos, desde el punto de vista
de la salud y el desarrollo emocional. Como adultos es importante comprender
que a la información hay que agregarle tareas de formación, porque tener más
datos no es indicador de mayor conocimiento. Asuntos como las enfermedades de
transmisión sexual, la anticoncepción e incluso el aborto, nos abren
las puertas de la información y se puede aprovechar para ayudarles a formarse.
El embarazo
adolescente ha sido declarado un problema que debemos intervenir desde la salud
pública a nivel mundial, pues sus consecuencias derivan en la perpetuación de
la pobreza y la vulnerabilidad social, la deserción escolar, la desigualdad
sanitaria y la estigmatización, entre otras, además de fuertes implicancias en
la salud mental y el desarrollo sociocognitivo saludable de las y los
adolescentes, lo que hace más relevante redoblar nuestros esfuerzos para que la
tasa de natalidad provenga de una elección y no de la desinformación y el
abandono.