Este acto voluntario ha disminuido a límites que mantienen la red de salud en alerta.
Las cifras entregadas por la
Sociedad Chilena de Hematología indican que la tasa de donación voluntaria ha
disminuido notoriamente en Chile y se mantiene la práctica asociada a donantes
de reposición, que son las que se realizan para un familiar o amigo.
La causa de la limitada donación
voluntaria y permanente muchas veces se debe a una serie de mitos respecto al
proceso, los requisitos y los efectos de entregar sangre, los cuales queremos
aclarar para impulsar y motivar a más personas a acudir en ayuda de otros:
Mito: Sólo hay que donar
sangre cuando hay desastres, guerras o necesidades especiales.
Realidad: La donación es
necesaria durante todo el año para cubrir la gran cantidad de sangre necesaria
en muchos procedimientos médicos que ponen en riesgo la vida de una persona.
Contar con un banco de sangre contundente permite reaccionar con mayor rapidez
ante urgencias.
Mito: Donar sangre nos
debilita.
Realidad: Luego de la
donación podemos experimentar cansancio y en ese caso se puede guardar un poco
de reposo. Luego de 24 horas el cuerpo recupera el volumen de líquido perdido y
no debilita en ningún caso la función del organismo.
Mito: Los hipertensos
y los diabéticos no pueden donar.
Realidad: Las personas
con hipertensión deben tener su presión dentro de los rangos aceptables al
momento de la donación y estar cumpliendo su tratamiento de manera regular.
Quienes tienen diabetes y realizan el tratamiento oportuno con los
medicamentos indicados, sí pueden donar sangre, siempre y cuando no sea
insulinodependiente.
Mito: Las personas con
tatuajes o piercing no pueden donar.
Realidad: Si pueden
siempre que hayan pasado más de 12 meses desde el último tatuaje.
Mito: Si dono sangre puedo
contraer VIH-SIDA u otra enfermedad.
Realidad: Los donantes no
pueden contraer ninguna enfermedad, ya que todo el material usado para la
donación (jeringas, agujas, etc.) es estéril y desechable. Donar sangre es
seguro.
Mito: Donar sangre es
doloroso.
Realidad: Aun cuando
el umbral del dolor varía en cada persona, el proceso es realizado para causar
el menor daño posible y sólo se siente el piquete de la aguja.
Mito: Donar sangre
engorda o adelgaza.
Realidad: Cuando se
dona se dan entre 400 y 450 ml., cantidad que no provoca ningún tipo de cambio
físico, ni ganar peso ni perderlo.
Mito: Si tuve Covid-19 no
puedo donar sangre.
Realidad: Todas aquellas
personas que no hayan sido hospitalizados y se encuentren asintomáticas pueden
realizar una donación posterior a 4 semanas desde el alta médica.
Mito: Si me vacuno contra
el Covid-19 o influenza no puedo donar sangre.
Realidad: No existe restricción
para la donación de sangre de aquellas personas que se hayan vacunado contra
COVID-19 o influenza.
Para mayor información puedes
ingresar a minsal.cl o consultar directamente en el Banco de Sangre del
Hospital Barros Luco Trodeau al 225768255.